Cómo dejar de engañar a tu dieta
Está bien. Ya hemos pasado por esto antes, nosotros también lo hemos hecho. Todos sabemos que nunca es fácil negarse a esos antojos. Hay días en que los chocolates, las hamburguesas con queso y la pizza son difíciles de resistir, y es triste decirlo, pero estos días terminan siendo cotidianos. Pero no hay necesidad de preocuparse cuando estás realmente decidido a empezar a hacer dieta de verdad. Aquí tienes algunos consejos para que no hagas trampas en tu dieta.
Trampa
Sí, lo has leído bien. Adelante, haz trampas pero no te des un atracón. Algunos profesionales médicos dicen que está bien hacer trampa en la dieta... siempre y cuando no te pases de la raya. Cuando empiezas a hacer dieta, te determinas en las primeras semanas, pero tarde o temprano se te pasará el efecto y se te antojarán los alimentos que comes habitualmente. Por eso se recomienda tener un día de trampas todas las semanas. También puedes empezar a llamarlo recompensa en lugar de trampa para no sentirte mal por ello. Es como cuando has comido comidas saludables durante toda la semana y te recompensas con una rebanada de pastel de chocolate el fin de semana.
Escríbelo en tu diario
Tengan un plan de comidas para toda la semana e incluyan el día de la trampa. Compra los ingredientes por adelantado y hacer que sus comidas sean saludables. Rastrea cada día si te estás ciñendo al plan o si te estás desviando del camino.
Desvíe su atención
Otra buena forma es distraerse. Si has visto esas fotos con #foodporn en su pie de foto y te hizo babear, mejor que empieces a hacer otras cosas que no impliquen comida. Salgan. Pasea a tu mascota por el parque. Escribir historias. Haz música. Juega tu juego favorito. Duerme. De esta manera, tu mente se alejará de hacer trampa en tu dieta.